La equitación es un deporte que comprende diferentes disciplinas. Mientras que en algunas de ellas se pone a prueba la resistencia tanto física como psicológica del binomio conformado por caballo y jinete, en otras se pone el foco en la demostración de gran soltura y elegancia.
Partimos de la base de que todos los caballos podrían adaptarse a las diferentes disciplinas. Sin embargo, las cualidades propias de cada raza, en lo referente al carácter y características físicas de los caballos, los hacen más idóneos para unas modalidades ecuestres que para otras.
En este sentido, nos encontramos, por ejemplo, con los caballos Hannoverianos, caracterizados por su elegancia y sus movimientos atléticos, muy apropiados para la disciplina de la Doma Clásica, mientras que, por ejemplo, los caballos centroeuropeos, como silla francés o KWPN, se han convertido en una de las mejores razas para la disciplina de Salto.
Cada disciplina exige unos requerimientos específicos para ser superadas. Y tanto el caballo como el jinete han de estar a la altura y cumplir con las exigencias de cada prueba. En este sentido ¿qué características habría de tener un caballo para destacar en Doma Clásica? ¿Y en la exigente prueba de Raid?
Te contamos todo lo que necesitas saber acerca características de los caballos para las diferentes disciplinas ecuestres.
La Doma Clásica es una de las disciplinas ecuestres más populares y practicadas en todo el mundo. En esta modalidad se valora la armonía entre el jinete y el caballo durante la realización de unos movimientos de gran dificultad.
Dichos movimientos han de realizarse en el orden establecido y han de ejecutarse de manera natural por el caballo. ¿Cómo se consigue tal hazaña? Tras un exhaustivo entrenamiento realizado, de manera conjunta, por el jinete y el caballo, donde se crea la especial conexión que les une.
¿Cuáles son las características de los caballos para la Doma Clásica? Carácter dócil, agilidad, elegancia e inteligencia. En este sentido, los caballos Hannoverianos y los Westfalianos, cumplen con creces estas cualidades.
Sin duda una de las disciplinas más conocidas por todo el mundo. El salto ecuestre pone a prueba la unión entre el caballo y el jinete, pues han de estar totalmente compenetrados para conseguir los objetivos de esta prueba.
Desde barras paralelas a pequeños muros, pasando por fosos, jinete y caballo han de completar el recorrido en el menor tiempo posible sin derribar ningún obstáculo ni producirse rehúses.
¿Cómo ha de ser el caballo más adecuado para el Salto de obstáculos? Flexible, ágil, obediente y elegante, ya que, en esta disciplina, se valora el espectáculo y la belleza durante la realización de los saltos.
Entre las razas más apropiadas para esta disciplina ecuestre, encontramos el Warmblood Silla Francés, caracterizado por su agilidad y flexibilidad, así como por su carácter dócil que facilita los entrenamientos.
El Raid es una de las disciplinas más exigentes, tanto para el caballo como para el jinete. En ella, el binomio ha de recorrer largas distancias en tan solo un día, por lo que la resistencia del animal y la capacidad del jinete para dosificar las fuerzas del caballo, son claves para superarla.
La dureza de la prueba inclina la balanza hacia los caballos caracterizados por su fuerza, resistencia y unas condiciones físicas excepcionales. En este sentido, los Caballos Árabes son unos de los que mejor se adapta a esta disciplina, ya que, por su morfología, soporta muy bien las largas distancias.
Además de sus características físicas, es esencial que el caballo goce de un carácter equilibrado pues, la disciplina Raid es tan exigente física como mentalmente.
En la Doma Vaquera, la presencia e imagen que transmite el caballo es de vital importancia. Estamos ante una disciplina en la que se ensalza, por encima de todo, la belleza de estos majestuosos animales.
En esta disciplina, el caballo ha de realizar una serie de movimientos traídos de los que se ejecutan en el campo para trabajar con el ganado vacuno. El caballo por excelencia para la doma vaquera es el Pura Raza Española, caracterizado por su agilidad, destreza y soltura en la ejecución de los ejercicios.
Además, los PRE se caracterizan por ser caballos equilibrados, nobles, dóciles y de una belleza excepcional.
Esta disciplina ecuestre sería el equivalente al Triatlón de los atletas. A lo largo de tres días, se disputan tres pruebas: doma, cross y salto de obstáculos en pista. Todas las pruebas son realizadas por el mismo caballo.
Por ello, si tenemos que destacar una característica del caballo hablamos de versatilidad. Sin duda, los caballos ideales para la disciplina de Concurso completo han de estar dotados de agilidad, velocidad, resistencia, docilidad, elegancia y equilibrio.
Estamos ante una competición muy completa que requiere de esfuerzo, constancia y experiencia, tanto por parte del animal como del jinete.
Esta disciplina acrobática ecuestre consiste en practicar ejercicios gimnásticos sobre un caballo a galope en círculo, guiado “a la cuerda” por un conductor. Se trata de una de las disciplinas menos conocidas del mundo del caballo, aunque su popularidad no deja de crecer.
Esta disciplina requiere de una gran fortaleza física por parte del jinete, así como una dilatada experiencia en la monta de los caballos. Han de realizar ejercicios de gran dificultad técnica que, en conjunto, forman una coreografía original y bella.
Por lo que respecta al caballo, su comportamiento es lo más valorado por los jueces, así como su conexión con el gimnasta. El carácter dócil, equilibrado y amable de los caballos son las cualidades más buscadas para la práctica de esta disciplina.
Junto a estas cualidades que conforman la personalidad del caballo, los requerimientos físicos son: un lomo amplio y plano, el cuello redondo y una grupa caracterizada por su buena musculatura. Además, el caballo, ha de realizar movimientos suaves y definidos que permitan al gimnasta realizar los ejercicios de manera cómoda y segura.